Con la llegada del verano, los grupos electrógenos y los compresores de aire quedan más expuestos a condiciones exigentes. Las altas temperaturas aumentan el riesgo de sobrecalentamiento del motor y, por eso, es clave anticiparse con tareas de mantenimiento preventivo. Te contamos qué aspectos revisar y qué medidas tomar para asegurar el rendimiento óptimo de estos equipos y prevenir fallas:

Asegurá una correcta ventilación

Si el grupo electrógeno está en una sala, es importante certificar que haya una buena circulación de aire. Esto implica tanto una buena entrada de aire como una correcta evacuación del aire caliente del radiador. Con los compresores de aire sucede lo mismo: se debe chequear que se mantenga un flujo de aire que permita conservar un funcionamiento correcto.

Limpiá los radiadores

Un radiador limpio previene sobrecalentamientos y asegura un flujo permanente de aire. La limpieza del radiador evita obstrucciones en las rendijas de ventilación y permite que el equipo refrigere correctamente. Esta limpieza se puede realizar tanto aspirando como hidrolavando.

En el caso de los compresores de aire, además del hidrolavado estival, sopletear semanalmente el radiador es una buena recomendación para mantenerlo siempre limpio.

Reemplazá el líquido refrigerante

Tanto en grupos electrógenos como en compresores de aire, se aconseja una renovación del líquido refrigerante. Además, se debe realizar una inspección visual y chequear que no haya pérdida de líquido refrigerante en la bomba de agua.

Renová el combustible

Un gasoil en buen estado asegura que el equipo funcione correctamente. Por el contrario, si está en malas condiciones, puede provocar oscilaciones en el motor, pérdida de potencia o incluso que el equipo se detenga por completo. Para evitarlo, es clave verificar que el combustible almacenado no tenga más de seis meses de antigüedad.

Reemplazá aceite y filtros

Si el compresor de aire cumplió la cantidad de horas sugeridas en el manual o pasó más de un año, se deben cambiar aceite y filtros. Programá su recambio antes del verano y, en el caso de los grupos electrógenos, luego de la renovación de combustible. Asegurate de usar repuestos originales para cuidar la vida útil y el funcionamiento normal del equipo.

Probá el equipo antes del verano

El mantenimiento preventivo debe cerrarse con una prueba de funcionamiento de al menos una hora, aplicando una carga del 60% o más de la capacidad real del equipo. Esta prueba se realiza una vez, antes de que empiece el uso intensivo en verano. Una vez completada, se recomienda cambiar los filtros de combustible para eliminar residuos generados durante la prueba. Durante el verano, es importante encender el equipo una vez por semana, al menos por 30 minutos, aumentando la carga de forma progresiva hasta alcanzar su temperatura normal de operación.

Anticiparse con mantenimiento adecuado no solo reduce riesgos de falla, también asegura la continuidad operativa cuando más lo necesitás. Te acompañamos con el soporte técnico y los repuestos originales para que tus compresores y grupos electrógenos enfrenten el calor sin sorpresas. Contactanos y planificá el verano con respaldo.